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Orígenes y motivación personal
Me llamo Lorena, soy natural de Lora del Río, un pueblo sevillano situado a orillas del Guadalquivir, aunque actualmente resido en La Luisiana, otro pueblo de la provincia. Mi pasión por los más pequeños ha sido siempre una parte esencial de mi vida, algo que también se refleja en mi formación como Educadora Infantil.
El nombre de mi tienda, Amapola Kids, tiene un profundo significado personal. La amapola era la flor preferida de una tía muy especial, a quien consideraba como una segunda madre. Por desgracia, ella falleció demasiado pronto, a los 50 años, dejando un vacío irreparable. En su honor, me tatué hace años una amapola en el brazo, y no podía ser de otra manera: decidí que este proyecto llevaría su nombre.
El comienzo de la aventura
Aunque siempre tuve el sueño de dedicarme a la moda infantil, no me atrevía a dar el paso. Fue una fría mañana de diciembre de 2023 cuando Fran, mi pareja, y yo decidimos visitar varios grandes almacenes en la capital para informarnos sobre cómo empezar. Allí nos asesoraron sobre licencias y otros aspectos básicos.
Finalmente, el 13 de diciembre de 2023, después de muchas noches sin dormir, me hice autónoma para lanzarme al adorable y, a veces, desafiante mundo de la moda infantil.
Los retos y aprendizajes
Desde entonces, he vivido un torbellino de emociones: he llorado, reído e incluso discutido con Fran debido al estrés, la inexperiencia y el agobio. Sin embargo, tengo claro que este proyecto no habría sido posible sin su apoyo incondicional desde el primer momento. Su ánimo y fortaleza han sido clave para superar las dificultades y evitar que me rindiera en los momentos más oscuros.
El presente y el agradecimiento
Hoy, me siento orgullosa de Amapola Kids y de haber creado un espacio donde las mamás confían en nosotros para vestir a sus pequeños. Estoy profundamente agradecida a todas las familias que han confiado en este proyecto desde el principio.
Tampoco puedo olvidar a mis amigos y familiares que, con mensajes, llamadas y palabras de ánimo, me dieron fuerzas para mantener viva la ilusión que dio inicio a esta aventura. A todos ellos, los llevo en el corazón.
